
Por Ramón Mercedes
NUEVA YORK.- Los automovilistas perdieron en promedio 49 horas al año atrapados en el tráfico, lo que generó un impacto económico estimado en $86,000 millones de dólares en todo el territorio estadounidense, de acuerdo con el informe Global Traffic Scorecard 2025 de la empresa de análisis de transporte INRIX.
El estudio revela que el tiempo anual perdido por conductor aumentó un 11% respecto a 2024, confirmando que la movilidad urbana volvió a patrones similares a los de 2019.
Para ciudades densas como NYC, esta tendencia se traduce en mayores costos económicos, jornadas más extensas y un deterioro progresivo de la calidad de vida.
La Gran Manzana figura entre las ciudades más congestionadas del país, aunque Chicago lideró el ranking nacional como la ciudad con mayor congestión en 2025 y NYC se mantuvo en el segundo lugar.
Según INRIX, los conductores neoyorquinos perdieron en promedio 102 horas al año en atascos, una cifra que refleja una estabilización respecto a 2024, cuando la ciudad encabezó la lista.
El costo económico asociado a esta congestión fue especialmente elevado. En conjunto, NYC registró pérdidas cercanas a los $9,700 millones, con un impacto promedio de $1,879 por conductor.
Estas cifras incluyen no solo el valor del tiempo improductivo, sino también el mayor consumo de combustible, el desgaste de los vehículos y los efectos indirectos del estrés prolongado.
Miles de conductores dominicanos manejan a diario en esta Metrópoli, al igual que en otras ciudades congestionadas como son, aparte de Chicago y NYC, Philadelphia, Los Ángeles, Boston, Miami, Atlanta, Houston, Washington D.C. y Seattle.
En octubre de 2025 se registró un récord de 290,000 millones de millas recorridas por vehículos en EUA, lo que confirma una recuperación plena de los hábitos de desplazamiento.
En NYC, estos cambios se reflejan tanto en los desplazamientos laborales como en los viajes no relacionados con el trabajo.
Frente a este escenario, algunas ciudades han implementado estrategias para reducir la presión sobre sus redes viales.
El caso más emblemático es el de NYC, donde desde 2024 funciona un sistema de peaje por congestión para ingresar al sur de Manhattan durante las horas punta.
Las tarifas alcanzan los US$9:00 entre semana y $2,25 en horario nocturno, según la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA).
Esta política recaudó alrededor de $50 millones en su primer mes de operación y se estima que podría acercarse a los $500 millones hacia finales de año.
El objetivo es desincentivar el uso innecesario del automóvil y financiar la modernización del transporte público, que todavía enfrenta dificultades para recuperar pasajeros de forma sostenida.

