China, (EIRNS) — Sin intervención, la situación palestino-israelí es un detonante para la Tercera Guerra Mundial.
La situación estratégica del suroeste de Asia es de un peligro increíble, y se ha intensificado de tal manera que el desbordamiento puede encender una conflagración global.
El pasado fin de semana, el ministro de Asuntos Exteriores de China, Wang Yi, conversó por teléfono con el secretario de Estado de EU, Antony Blinken, y le planteó que las naciones prominentes deben apoyar ahora una conferencia internacional sobre la situación de crisis. Estados Unidos ha sido informado.
Esta propuesta de conferencia de paz se remonta al pasado mes de junio, cuando el Presidente de China, Xi Jinping, presentó la necesidad de celebrar una conferencia de paz internacional sobre el conflicto entre Israel y Palestina. Esa propuesta vuelve ahora a la agenda, con urgencia vital.
China planteó la propuesta a Brasil la semana pasada. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Wang Wenbin, informó el 13 de octubre que Wang Yi está coordinando la propuesta de conferencia de paz con funcionarios de Brasil.
Cabe señalar que Brasil ocupa este mes la presidencia rotativa del Consejo de Seguridad de la ONU. Wang se reunió el 12 de octubre con el principal asesor de política exterior del Presidente de Brasil Lula da Silva, Celso Amorim, para tratar el conflicto palestino-israelí.
Wang dijo a Amorim: “China pide que se celebre lo antes posible una conferencia internacional de paz con mayor autoridad e impacto para generar un consenso internacional más amplio que tenga como base la solución de los dos Estados, y para formular un calendario y una hoja de ruta con ese fin”.
Wang Yi añadió que la ONU tiene tanto la responsabilidad como la obligación de “desempeñar el papel que le corresponde en la cuestión palestina”.
La situación sobre el terreno de los 2,3 millones de habitantes de la Franja de Gaza se reduce a condiciones que conducen, con toda probabilidad, a la muerte en masa.
Se calcula que un millón de personas están desplazadas dentro de Gaza; entre ellas hay más de 500.000 que intentaron abandonar el norte para dirigirse al sur. La Organización Mundial de la Salud ha emitido una declaración en la que califica de “sentencia de muerte” la orden de Israel de evacuar a la población del norte al sur.
Esto afectó a 22 hospitales, muchos de cuyos 2.000 pacientes estaban demasiado enfermos para ser trasladados. No hay agua ni instalaciones sanitarias para cientos de miles de personas. La electricidad está cortada en su mayor parte. La escasez de alimentos es aguda.
Desde el punto de vista militar, las Fuerzas de Defensa de Israel atacaron 250 sitios de Gaza el domingo 15 de octubre y siguieron atacando el lunes, incluso en el sur de Gaza, donde Israel ordenó a los residentes del norte que se desplazaran.
Hamás sigue lanzando cohetes contra Israel de forma intermitente. Israel ha concentrado fuerzas en dos frentes: la frontera de Gaza y la frontera con Líbano, frente a Hezbolá. Israel ha evacuado 28 poblados a lo largo de su frontera norte.
El grupo de combate del portaaviones USS Gerald R. Ford sigue en el Mediterráneo oriental.
El 13 de octubre, el grupo de combate del portaaviones USS Dwight Eisenhower partió del puerto de Norfolk, Virginia, hacia el Mediterráneo, para aportar fuerzas adicionales a lo que los militares estadounidenses llaman “disuasión”.
Se ha ordenado a fragatas de Italia y Gran Bretaña que se unan a las fuerzas estadounidenses. El aspecto dramático de esta fuerza masiva, como señalan muchos expertos militares, es que sólo una flotilla de drones podría causar daños importantes a la flota, antes incluso de que los aviones pudieran despegar.
El veterano analista de inteligencia estadounidense Ray McGovern envió el domingo un mordaz mensaje X sobre la locura marítima: Hacia el valle de la muerte navegaron los 10.000 a bordo de los portaaviones Ford y Eisenhower, presa fácil de enjambres de drones y otro armamento con el que no soñaron los que acabaron con la Carga de la Brigada Ligera.
¿Quizás Blinken-Nuland-Austin quieren eso? ¿O es que son tontos?”.
El secretario Blinken regresó ayer a Israel, tras un periplo por seis naciones árabes desde su primera visita de emergencia a Israel la semana pasada. Pero no sólo regresa sin solución, sino con el agravamiento de la crisis.
También visitó Israel la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. El Presidente Biden viajará a Israel el miércoles, según una información de última hora publicada anoche.
El presidente alemán, Olaf Scholz, ha dicho hoy que podría visitarlo pronto. Su letanía: “Israel tiene la responsabilidad y la obligación de hacer lo que quiera para protegerse”.
En cambio, el papel de la Coalición Internacional por la Paz (IPC), que sólo lleva cinco meses funcionando, es fundamental para impulsar una acción decisiva a escala internacional que intervenga en favor de la seguridad en todos los sentidos, para todas las naciones.
El viernes 20 de octubre tendrá lugar la segunda reunión abierta (en línea) de la CIP con personalidades mundiales y líderes de redes por la paz, tras el primer diálogo de este tipo celebrado el viernes pasado.
El foro del décimo aniversario de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, que se celebrará en China los días 17 y 18 de octubre, será una importante plataforma mundial de reflexión, propuestas y colaboración sobre la emergencia en el sudoeste asiático.
Desde ayer llegaron ya varios jefes de Estado y se han realizado importantes reuniones bilaterales, entre ellas la del ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, y el ministro de Asuntos Exteriores de China, Wang Yi.
Entre los miles de asistentes, hay delegaciones que representarán a 140 países, y 200 de los participantes serán de nivel ministerial o superior.
Se espera que el Presidente Xi Jinping dé la bienvenida a los asistentes al comienzo de las sesiones, y también que pronuncie un importante discurso el miércoles en la sesión plenaria.
El pasado fin de semana se produjeron protestas de masas en varias partes del mundo para pedir medidas humanitarias de emergencia en Palestina y conversaciones en favor de la paz en el suroeste asiático.
Miles de personas se manifestaron desde Los Ángeles, California, hasta Copenhague, Dinamarca. Ayer en Washington, DC, la gente ha acudido a las puertas de la Casa Blanca para exigir que se ponga fin a la destrucción de Gaza y que se tomen medidas en favor de la justicia y la paz.
La fundadora del Instituto Schiller, y co-iniciadora de la CIP, Helga Zepp-LaRouche conversó ayer con colaboradores, sobre el enfoque de las demandas inmediatas. Debe haber un fin inmediato de la violencia.
Debe producirse el proceso de una solución negociada, que debe tener lugar en el contexto de una conferencia de paz. Para tener éxito, la Mayoría Global debe desempeñar un papel protagónico en este proceso.
Todo esto es urgente, y puede entenderse como el primer paso hacia una arquitectura de seguridad y desarrollo a escala mundial.