Por Michel Dalí, enviado especial
París, (Prensa Latina) Temas como la consistencia del menú de los deportistas en la Villa Olímpica, los cromosomas XY y sus límites o las mofas al cristianismo en la ceremonia de apertura colocaron en una situación incómoda a los Juegos Olímpicos de París 2024.
En realidad, los organizadores de la cita parisina bajo los cinco aros sortearon con diversas explicaciones estas y otras criticas de las que han sido objeto. Sin embargo, los señalamientos y las polémicas parecen lejos de acallarse.
La queja de la inestabilidad en las comidas en el suministro de huevos y carnes en la Villa Olímpica encontró una respuesta poco convincente: los deportistas consumen más de lo calculado y se trabaja para garantizar que no se repita esta situación.
En otro asunto espinoso en París 2024, aunque fue admitida en el torneo femenino de boxeo, la argelina Imane Khelif, en el peso welter, ganó un combate a la italiana Angela Carini en 46 segundos.
La africana fue descalificada en 2023 por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) por incumplir las normas de elegibilidad.
Según estas reglas, atletas con cromosomas XY no pueden participar en certámenes femeninos. Pero el Comité Olímpico Internacional (COI) revertió la medida, además de asumir la dirección del boxeo al sancionar a la IBA por presuntos malos manejos financieros y de organización.
El caso recordó a Caster Semenya, corredora sudafricana con varias medallas en la escena olímpica y mundial en la media distancia, nacida con el patrón típico masculino de cromosomas XY y biológicamente atleta varón sudafricano.
Semenya estuvo siempre entre la gloria y la prohibición. Todavía en la actualidad, emprende acciones para que le sean reconocidas sus habilidades como atleta femenina, aunque su cuerpo diga lo contrario.
Cuando todavía no afloran escándalos sonados por presunto consumo de doping, planean sobre los Juegos los fantasmas relacionados con los niveles altos de testosterona que impedirían competir entre las féminas a quienes los tengan.
De todos modos, contrario a afirmaciones circuladas en redes sociales, la argelina no es una deportista trans y cumple con todos los requisitos de elegibilidad para el boxeo femenino, según el COI, si bien la defenestrada IBA insiste en que fue “probado que tiene cromosomas XY (del género masculino).
Ya más lejana en el tiempo, seis días después se habla menos de la escena denominada Festividad en la ceremonia de inauguración de París 2024, en la cual tuvieron absoluto protagonismo el trasvestismo, la comunidad LGTBI y hasta un cantante francés con el cuerpo desnudo y pintado. La iglesia católica consideró que fue ofendida de forma incisiva.
Al final, el balance tampoco es muy alentador en las condiciones para el trabajo de los medios de prensa, en especial por las falencias en los centros de prensa, particularmente en los estadios temporales, pequeños y con carpas improvisadas para el trabajo de difusión de los eventos.
Así y todo, Paris 2024 resiste en gran medida, gracias al encanto turístico de una de las ciudades más visitadas del mundo y con el valor agregado de poner al alcance de los turistas deportes con escenarios emblemáticos.