CIUDAD DE MÉXICO (AP) — El gobierno de México y de los otros 32 estados del país, en su mayoría gobernados por el partido oficialista Morena, acordaron el martes por unanimidad fortalecer y profesionalizar a las policías estatales, en un esfuerzo por mejorar el combate a la violencia y los delitos.

Se trata de una “condición indispensable para enfrentar la inseguridad”, dijo Omar García Harfuch, secretario de Seguridad federal.

La decisión, tomada durante la reunión del Consejo Nacional de Seguridad Pública — donde está la presidenta Claudia Sheinbaum, todos los gobernadores y los titulares del Ejército, la Marina y la fiscalía federal — consolida el giro en seguridad iniciado con la actual administración hace casi un año, según analistas.

Tiene lugar el mismo día que el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, llegaba al país y justo cuando la administración de Donald Trump está pisando el acelerador en su lucha contra los cárteles.

El expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024) disolvió la antigua policía federal, acusándola de corrupción, y recortó casi todos los fondos federales para entrenar y equipar a las policías locales mientras impulsaba el papel de los militares en tareas de seguridad y repetía su lema de “Abrazos, no balazos” como eje de su política contra la violencia.

Sheinbaum, aunque es firme defensora de su legado y de cuerpos militarizados como la Guardia Nacional, se apartó discretamente de ese enfoque.

Encomendó a García Harfuch — un ex policía federal — coordinar a todas la instituciones de seguridad a la vez que se reforzaba la profesionalización de sus integrantes en materia de investigación e inteligencia. Comenzaron así a aparecer equipos de policías de élite tanto uno de ámbito nacional como otros locales en algunos estados.

La infiltración del crimen organizado siempre ha sido mayor en las policias municipales o estatales y por eso el reforzamiento y la profesionalización de estos cuerpos ha sido una prioridad reiterada desde hace años por distintas organizaciones nacionales e internacionales, así como por gobiernos estadounidenses y también mexicanos previos a López Obrador.

En la primera reunión del Consejo Nacional de Seguridad con Sheinbaum como presidenta se retomó el tema pero el martes se estableció una hoja de ruta para que los estados presenten un plan de reclutamiento a partir del año proximo y tengan academias policiales homologadas para 2028.

También se aspira a aumentar el número de los ministerios públicos de las fiscalías locales y a profesionalizarlos, otro elemento clave para luchar contra la impunidad en el país.

Según dijo Sheinbaum en la sesión abierta del encuentro, el objetivo ahora es “aterrizar” la estrategia federal en cada estado, incluidas las nuevas leyes para enfrentar delitos como la extorsión o la desaparición de personas.

Pese a que todos los gobernadores votaron a favor, algunos, como el opositor Pablo Lemus, del violento estado de Jalisco, pidieron más apoyo financiero para lograrlo.